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Los jóvenes de hoy tienen afán por salir del colegio.

Entre más temprano, mejor.

Chicos y chicas de 15 y 16 años ya se están enfrentando a retos universitarios, cargas académicas superiores e incluso obligaciones financieras que no tenían en el colegio.

¿Será que dejar a los chicos salir del colegio tan temprano será la mejor opción? ¿Por qué los jóvenes lo quieren hacer?

Te voy a contar por qué los estudiantes quieren salir del colegio temprano y según la opinión de los investigadores por qué es mejor esperar hasta cumplir los 18 para graduarse.

Ojalá mis padres hubieran leído este artículo antes de dejarme graduar a los 16 años. Clic para tuitear

Las clases que toman no son interesantes

Es normal querer salir del colegio a los 15 años cuando lo que estás estudiando es irrelevante o no sirve para avanzar en tus metas.

Hoy en día, los colegios siguen enseñando lo que aprendimos los padres hace 30 años.

Factorización de ecuaciones cuadráticas, sumas de moles de potasio, Pedro Páramo y la memorización de la tabla química de elementos. (Este video en inglés es buenísimo para aprenderse la tabla cantando).

¿Por qué los colegios siguen enseñando lo mismo de siempre?

Porque eso dice el Ministerio de Educación, eso es lo que está escrito en los libros y eso es lo que nuestros hijos deben regurgitar en los exámenes de estado.

Si las clases no tienen sentido para la vida de tus hijos, como nativos digitales que ellos son, con toda razón querrán dejar los salones lo antes posible (y la verdad, no los culpo).

Es muy difícil motivar a un estudiante que está aprendiendo en el colegio conceptos del siglo XX, no del siglo XXI. Eso aburre a cualquiera.

Es normal querer salir del colegio a los 15 años cuando lo que estás estudiando es irrelevante o no sirve para avanzar en tus metas. Clic para tuitear

Las jornadas educativas son eternas

Los jóvenes quieren salir del colegio a temprana edad porque los días son tan largos como un día de trabajo.

Clases que comienzan a las 6 de la mañana y terminan a las 4 de la tarde. 10 horas en el colegio en donde no están aprendiendo nada que les vaya a servir para la vida.

¿Quién quiere seguir madrugando y llegar a la casa rendido a dormir y repetir la misma historia al día siguiente? Nadie.

No hay oportunidad para perseguir sus pasiones, sus talentos, sus habilidades o crear un horario propio con jornadas educativas tan extensas.

Los jóvenes quieren salir del colegio a temprana edad porque los días son tan largos como un día de trabajo. Clic para tuitear

La presión de los compañeros y los profesores

La presión de las notas es algo que ha hecho que muchos de nuestros hijos abandonen la escolarización.

Nadie es bueno en todo. Sin embargo, esperamos de nuestros hijos buenas notas en todas las materias.

Los maestros también ejercen presión a los estudiantes con la cantidad de trabajos y tareas que dejan para la casa, cuando no hay tiempo para realizarlas.

Al final, nos toca a nosotros, los padres, ayudarles o incluso hacerlas con ellos hasta altas horas de la noche.

No es justo que los niños tengan que trabajar hasta altas horas de la noche haciendo trabajos y tareas. Clic para tuitear

Qué debe cambiar en el colegio

Para que los jóvenes quieran quedarse en el colegio deben pasar varias cosas:

  • Que los colegios enseñen habilidades del siglo XXI como pensamiento crítico y colaboración.
  • Que los jóvenes tengan tiempo para practicar su alfabetismo digital con la programación, typing y análisis de la información.
  • Que aprendan emprendimiento para que puedan crear sus propios negocios y sostenerse en el futuro.
  • Que la jornada del colegio sea sólo en la mañana para que los chicos puedan hacer otras cosas en la tarde, como perseguir sus pasiones y talentos.
  • Que haya en el colegio un ambiente de compañerismo y no de competencia.

De esta manera, tanto los jóvenes como sus familias, podrían pensar que lo mejor es quedarse un par de años más en el colegio.

Los colegios deberían tener jornadas más cortas, quitar el relleno y enseñar lo relevante para los nativos digitales. Clic para tuitear

¿Qué dicen los investigadores? ¿Es realmente mejor graduarse a los 18 en lugar de los 16?

Según la investigación del profesor de la Universidad de Toronto, Philip Oreopoulos, graduarse a los 18 años «da más beneficios que problemas», sobre todo si «va acompañada por esfuerzos para hacer que esos años extra sean más productivos y aceptables para aquellos que realmente no quieren estar en la escuela».

El análisis se realizó con muestras de niños entre los 7 y los 15 años de 1960, 1970 y 1980 en los Estados Unidos, Irlanda, Noruega y Canadá.

El colegio debe ser un lugar con un ambiente de compañerismo y no de competencia. Un lugar seguro y no de temor a que nos pase algo malo. Clic para tuitear

Tienen más ganancias económicas

Según la investigación, los jóvenes que se graduaron más tarde tuvieron un 15% más de ganancias económicas en su vida adulta.

Estos resultados son similares en todos los países.

Los jóvenes que se quedan hasta los 18 años tienen más madurez para enfrentar los retos de la vida como adultos. Retos universitarios como las cargas académicas o laborales como la búsqueda de empleo y presentación de entrevistas son afrontados con más dedicación y empeño.

Los jóvenes menores aún no tienen la corteza pre-frontal desarrollada para la toma activa y responsable de decisiones. A los 16 años aún priman las decisiones basadas en la emoción, el riesgo y la aventura.

Mientras que a los 18 años, la responsabilidad, el deseo de salir adelante y de cumplir metas es más notoria y prevalente. Sea para conseguir un trabajo o continuar con sus estudios, a esta edad quieren aprovechar el tiempo lo máximo posible, ser partícipes en la sociedad y aportar para su crecimiento personal.

Gozan de mejor salud

Dentro de los individuos de la muestra del estudio, entre los 25 y 74 años, el 9.2% dijo tener una discapacidad física o mental que no le permitía trabajar al 100%. Según los investigadores, si ellos hubiesen permanecido un año más en el colegio, esa probabilidad hubiese disminuido al 1.7%.

El simple hecho de estar un año más en la escuela después de los 16, les ayuda a los jóvenes a estar más tranquilos frente al futuro.

Las preocupaciones, el estrés, las responsabilidades académicas y financieras están enfermando más gente que los virus y las bacterias en el siglo XX.

Estamos en la sociedad del conocimiento en donde la inteligencia artificial está empoderando y aumentando las capacidades de los seres humanos para adquirir información.

Aunque es una ventaja frente a nuestros precursores, también trae más preocupaciones. El ser más productivo, más especializado, más conocedor, tener una opinión sobre todo ha puesto en nuestros hijos una responsabilidad superior a la que ellos pueden soportar.

Un año más de colegio les puede enseñar pensamiento crítico y mindfulness. Estar presentes en el presente, saber cuáles son sus valores, su cosmovisión, sus posiciones frente a los temas delicados de la vida, les disminuye el riesgo de enfermarse en el futuro.

Son más felices

La muestra de los individuos entre 18 y 65 años de Inglaterra e Irlanda entre 1973 y 1998 mostró que los jóvenes que se graduaron a los 18 (en lugar de los 16) tienen una posibilidad de estar más satisfechos con sus vidas en un 5.2% adicional.

Al no tener la responsabilidad temprana de escoger un camino de vida (universidad o trabajo), estar solos en ese camino, ser par con sus padres, ser responsable por pagos de seguridad social, transporte, comida, ropa y otros gastos personales, los hace más felices cuando son adultos.

El colegio debe ser el tiempo donde desarrollas un emprendimiento en un lugar seguro. Tomando los errores como parte del experimento y no con el afán de hacer dinero porque dependes de eso.

El poder desarrollar la autoestima hasta ser adulto es otro punto fundamental. Cuando eres menor de 18 (y aún después) los jóvenes tienen inseguridades en las que pueden trabajar mientras están en el colegio.

Trabajar en la madurez emocional y mental es básico para ser un adulto centrado y balanceado. Mindfulness es algo que deben aprender todos los jóvenes antes de salir del colegio para no tener que pagar psicólogos después.

Además, tienen mejores matrimonios y sus hijos van a gozar de un padre o una madre que ya tiene ese pensamiento de graduarse maduro en lugar de muy joven.

Conclusión

Según los estudios, lo mejor para un estudiante es salir del colegio a los 18 años.

Hay más ventajas que desventajas. Ser más maduro, más centrado, ser un adulto con la posibilidad de:

  • Afrontar cargas académicas universitarias,
  • Escoger una carrera conforme a tus pasiones y habilidades,
  • Tomar decisiones con información en lugar de la emoción,
  • Fortalecer tus hábitos de estudio,
  • Tener un emprendimiento mientras estudias,
  • Lidiar mejor con la auto-disciplina,
  • Tener un carácter más desarrollado y definido para dar tu posición sobre lo que piensas.

Aparte de ser más feliz, gozar de mejor salud y tener más ganancias económicas a lo largo de tu vida.

Ojalá mis padres hubieran leído este artículo antes de dejarme graduar a los 16 años. Pero, del cielo cayeron limones y yo hice limonada.

En Rhema E-School les ayudamos a los chicos a desarrollar sus dones, talentos y habilidades en un lugar seguro. Le damos la oportunidad a los jóvenes de estar hasta los 18 años para que puedan invertir en ellos mismos antes de salir a la vida adulta.

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